Afecto mariposa
La vanidad
de su aleteo también
depende de las cavidades
del aire y un trapecio.
Efecto felino
Andas gatita persa
dispersa en andas,
la erógena mutilación del muslo.
Lobos
Nuestra caperucita interior
devuelve toda semejanza potencial
de ser luna llena.
Perro ovejero
Tanto lobby madurado
en los caniles tranquilos,
los niños juegan lejos de aquí.
Pulpo pulsión
el refugio abrasador del mar
castiga cada
parte del cuerpo
y este recreo.
La escara bajo la piel
revienta los
ojos
hasta verlos.
Yo camello
La joroba recreada por el agua
inunda el cactus
o las orillas del ello.
Lombriz solitaria
La tierra transparente
entorpece la traslación
y desde arriba todo el oleaje.
Un dinosaurio en Washington
supone la edad provecta
de un hombre sin tiempo.
Las esposas del jabalí
Con las muñecas adormecidas
las marcas de la gestación
tendrán que aprender a parir muñecos.
El grillo se calma;
la noche prevalece,
y esta vigilia desmenuza.
Cachalote
La unción sónica alerta
su blandura hasta mecerse
en la esquina del péndulo.
Vaquita enajenada
En el pasto
todo cráter insurrecto
es más orgánico que un cendal.
La intriga del puma
embiste la intemperie
de una escena en el quirófano.
Codorniz
El huevo se acuesta en Dios
y su cáscara viscosa
respira almohadas.
Cebra canónica
Su celda visceral
mi muerte súbita;
nuestra última cena.
Elefante blanco
Buda busca en la quietud
lo que la matriz,
en la trompa.
La ceguera del lince
Por la gradación sumida del ojo
confluye la policromía
de un lente hipnótico.
La zorra huele la estatua
y se enquista la nariz dormida
por entre sus ajuares.
El escorpión se envenena
se inmola en su sangre
y desvanece.
La infausta celulitis del molusco
transforma lo que parece en los ataúdes
en chicle cavilado.
La arruga de la oruga
Como un suplicio cibernético
los vestigios del almanaque
son parte de una aspiradora fallecida.
Papá chinchilla
La piel liviana nos tapa
el último lunar en la falange
después de la cría negra.
Mamá tábano
La hilera de albatros
troquela las lenguas huérfanas
por decir algo.
La respiración del mosquito
y tantas noches de murga urgente
enfadan la sangre exhalada.
Peso mosca
El último round en el dulce de ciruela
se abrevia en la cuerda manchada
hasta troquelar.
Sardina
El agua mujer enlatada
otro hedor que no emerge
a las superficies de la porcelana.
La chancha del chancho
Sobre el altar derruido suena
un avemaría que acepta
el redoblante después del si.
Araña pollito
El molde se cría a imagen y semejanza
de cierta divinidad que crea
apósitos en los ojos.
Riña
La cresta inusual del preludio
anuncia el acto reflejo de la mañana,
somos gallos insomnes.
Mata polilla
La naftalina pudre la madera
y el ropero cae sobre si mismo
hasta morir apolillado.
Acaro cautivo
Después de un piojo exonerado
nada es igual...
la cabeza hiede y suda.
Jilguero
Los escombros aplastados
por la jaula nupcial del polvo
mecen ante un trinar de alfombras.
Plagas
Las langostas trepan
hasta el final del poste y no hay luz
en los alrededores.
Grulla clásica
Acompasando el movimiento
al baile celeste del ripio
por donde pasan triciclos.
Todos los dragones drogones
esperan el fuego del puntero
para amedrentar a las mangueras.
Desenfocados
En la orilla principal
del mito de la piel anónima
surge otro foco.
Reno
Ante cierta infidelidad postergada
la primavera hará que no caiga
la cornamenta del viejo.
La súplica del mamboretá
al cielo foráneo
contempla la danza
despoblada
Un tigre más a la
mancha
juega y proclama
un reglamento en su
límite.
La merluza se
refriega los ojos
y la erosión del
aceite
desazona toda
perspectiva tridimensional.
El océano espatulado
se contrae si las marsopas
muerden sin protector el puerto
La costra de la ostra
De la tasa ondulante baja
la nariz hasta el agua revestida
y sube
Sin h
La fecha del chacal mancha
el chaleco de mecha ancha
y achata el chat.
El deceso del alambre
Después de la lluvia
el alguacil no pide nada
salvo el cielo.
El prontuario de la luciérnaga
presume un dos por uno
después del corte.
Por un cospel se entrega la ameba
y resurge la insurrección
del ecosistema infinito.
Nuestra nutría
Alberga andrógena la sed
del cuero y suda
la piel de la piel.
Vuestro buitre
Desaloja hermafrodita la desidia
de la piel y se seca
el cuero del cuero.
Oso bi
La zozobra de la osamenta
posa en los pozos de un cross
o lozas de osadía y trozos.
El gregarismo del pato sirirí
lo filtra del último paso como ayer
el árbol manso sin várices
El sapo posa
traga su postura como a un cigarrillo
y después explota
La rana renal
Marinada, sobre el diván
un rictus desconoce el último cólico
se desmorona, bajo el diván
Desvelo de ñandú
Un ala inútil sin facebook
el cuello hace imposible
que despierte el vuelo.
El atavío desvinculado del germen
se despluma entre las castas depuradas con
gel,
las gallinas del tío.
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